La mejor forma de gestionar las cobranzas de tu empresa
Cobranza es el acto y la consecuencia de cobrar: obtener el dinero correspondiente al desarrollo de una actividad, a la venta de un producto o al pago de deudas. La cobranza es el cobro en cuestión
Las empresas suelen contar con empleados o incluso oficinas o departamentos destinados a la gestión de cobranzas de sus créditos. Para cualquier compañía, la cobranza de los servicios prestados o los productos vendidos es esencial: el dinero obtenido sustenta su funcionamiento. Si la empresa no cobra (es decir, si sus clientes no pagan), no recibe los fondos que necesita para funcionar y para asumir sus propias obligaciones.
Cabe destacar que incluso existen empresas especializadas en cobranzas, como la nuestra. De esta forma, aquel que necesita cobrar dinero de otras personas no se involucra directamente en el reclamo, sino que apela a este tipo de entidades.
Gestionamos las cobranzas de tu empresa
El procedimiento de cobranza suele ser estipulado por quien ofrece el producto o el servicio. Aquel que debe pagar, de este modo, ya sabe cuáles son las condiciones en cuestión. Si una persona contrata un servicio de telefonía y la compañía telefónica, en el contrato establecido, detalla que la cobranza se realiza del 1 al 10 de cada mes, el sujeto tiene que pagar en ese plazo. De lo contrario estará en falta y podrá ser penalizado de distintas maneras (con el cobro de intereses o la cancelación del servicio, por citar dos posibilidades).